Alerta de tendencia: volvieron los pañuelos

Lo leímos en un artículo de Vogue, en enero, cuando las tendencias comenzaron a florecer entre las honorables invitadas a las fashion weeks más esperadas de todo el mundo. Así como es ley en el mundo de la moda, todo lo que es tendencia, va a parar a los locales del shopping. Se trata de un accesorio que, si no abunda en nuestro armario, al menos tenemos uno en particular que, por algún misterioso motivo, es único para nosotras. Sí, estamos hablando de los pañuelos de seda que son atemporales: los usamos en invierno cuando queremos escapar de la bufanda que ya nos aburrió o en verano, cuando hay una brisa fresca que nos invita a usarlos.

  

Si no lo compramos en esta temporada otoño-invierno, o la temporada pasada, posiblemente estemos reciclando algún pañuelo de seda que le pertenecía a nuestra abuela o algún pariente lejano, pero que su estampado de lunares nos sigue enamorando como si fuera el último artículo de tendencia.

Ahora volvamos a entender cómo sucedió esto: lo veníamos usando en el cuello, con un simple nudo; es ese tipo de estilismo que tal vez vimos en alguna vidriera del shopping y que nos encantó por su simpleza. Pasamos a utilizarlo como llavero y lo dejamos colgar de nuestros bolsos y carteras, porque queríamos darle una nueva vida a este artículo que encontramos en la mayoría de las tiendas. Incluso, las más jugadas se animaron a usarlos como cinturón, para marcar con confianza la figura.

 

¿En qué momento sucedió? No sé decirte, pero sí te afirmo que la tendencia ahora dicta usar los pañuelos de seda en la cabeza. Las prescriptoras de moda más famosas nos enseñaron que la técnica es muy fácil: un nudo en la pera y dejamos caer el accesorio por nuestra cabeza.

La otra pregunta es: ¿cómo lo llevamos? De manera muy simple: podemos recurrir a una camisa básica –de esas que encontrás en casi todas las tiendas del shopping– combinada con un pantalón de vestir o un poco más casual como un denim; con un jersey de color neutro y una falda de tono oscuro, y si te animás, podés sumarle misterio a este look de los años sesenta y agregarle un par de lentes de sol. Las combinaciones son tan infinitas como los estampados de pañuelos de seda: a lunares, de dos colores, tartán, lisos. Animate, es cuestión de recorrer las tiendas del shopping y encontrar tu próximo artículo de tendencia.